El 28 de diciembre cerramos el año 2016 con la magia de escenario de Alfonso V en el Centro Cultural de Becerril de la Sierra, magia para toda la familia.
Última actuación del año. Y que mejor manera que hacerlo en el lugar más espectacular para la magia, magia en el teatro. Magia en el Centro Cultural de Becerril de la Sierra.
Las navidades son días mágicos y es el momento ideal para programar ilusionismo en el teatro. Así pensaron en Becerril de la Sierra que contactaron con Alfonso V a través de The Magic Factory.
En años anteriores ya habíamos actuado para los ayuntamientos de localidades cercanas. El boca a boca, el feedback recibido fue el responsable de que buscaran nuestros servicios.
Alfonso V, mago madrid, les preparó un show de escenario para todos los públicos. Sí, la magia es para familias, niños, padres, abuelos. Un momento perfecto para acudir juntos a disfrutar de la cultura del directo.
Les hicimos un show divertido, con mucha participación. Se acabaron los tiempos donde la magia era sólo para mirar y admirar las habilidades sorprendentes del prestímano.
En estos tiempos que corren nos gusta la interactividad, la participación. Incluso en medios tan pasivos como la televisión y la radio se consiguen esta participación aunque sólo sea por redes sociales.
Y nosotros vamos más allá. Nuestro espectáculo de magia es un espectáculo único, cada día es diferente, porque depende del público.
- Los niños más pequeños participan con su ternura y su gusto contagioso por los gags repetitivos que no dejan de reír.
- Los niños de 7 a 9 años juegan a ser magos, con su afán de vivir en primera persona los misterios cómicos del mago.
- Los preadolescentes vuelven a su niñez pero disfrutando de la magia con más matices, saboreando los guiños para adultos y las sutilezas de este arte.
- Y los padres se dejan llevar por el ambiente, jugando igualmente, riéndose de la espontaneidad de sus hijos, viendo como estos pasan momentos inolvidables. ¡Qué puede gustar más a un padre o madre que ver a sus hijos felices!
Son sólo emociones, sorpresas, momentos de diversión, risas, guiones frescos, cultura de la calle en definitiva. Pero es por este motivo por lo que estos espectáculos de magia tienen éxito. No pretenden rebuscar contenidos culturetas, ni criticar la sociedad, ni hacernos pensar en crisis, ni en nuestros aprietos del día a día. Nuestra meta es hacer olvidar los problemas por un momento y regalar un poquito de fiesta y felicidad.
Así nos despedimos del año. Un año intenso que recordaremos con cariño. Un año que no es más que otro que nos llevamos en el corazón. Esperando con ilusión un nuevo año, un 2017 donde seguiremos disfrutando de nuestro bello arte: el ilusionismo.
