El 14 de agosto reanudamos nuestra actividad mágica con un show de magia familiar en la localidad madrileña de Berzosa de Loyola organizado por su ayuntamiento y coordinado por The Magic Factory, mago en madrid.
Alfonso V volvió a las andadas en una noche festiva organizada por el ayuntamiento de Berzosa de Loyola. En la terraza de uno de los bares del pueblo prepararon una gran chocolatada y como aperitivo y para atraer más público programaron la actuación del mago Alfonso V.
Una actuación que estaba prevista, a priori, para no más de 30 personas, acabó siendo para casi 100. Alfonso V tenía previsto hacer su show de magia de close-up, magia para pequeños grupos, pero supo adaptarse a la percepción al aumento de público.
Fue tal la atención que captó que no se notó la ausencia de megafonía. Todo el público estaba atento e impregnado de la atmósfera mágico-cómica de los diversos números de su espectáculo. El público no sólo llenaba las mesas de la terraza, si no que se arremolinaba alrededor, guardando un respetuoso silencio y disfrutando de la magia y las risas de los juegos.
Magia en la que los mismos espectadores eran los verdaderos protagonistas de los juegos. Y esto en un pequeño pueblo se convierte en una alegre fiesta, ya que todos se conocen, son familiares, amigos o conocidos. Las participaciones de los espectadores son festejadas y al público no le importa jugar con el mago.
Tras la actuación de Alfonso Quinto repartieron el chocolate y la rica bollería, de los cuales dimos buena cuenta para recuperar energías.
Estas fiestas son especiales para nosotros. Comprobamos que nuestro arte, todo el trabajo y empeño de tantos años de estudio y preparación, dan su fruto. Conseguimos lo que nos proponemos. Conseguimos que el público sea feliz durante la hora del show y los momentos posteriores mientras lo recuerdan, o cuando lo recuerden en el futuro. Conseguimos que rían, jueguen, se desinhiban, se olviden de sus preocupaciones.
Pero además del optimismo que les inculcamos les hacemos pensar, les hacemos ver lo importante que es pensar de forma distinta y creativa.
La magia es una actividad enriquecedora, emocional. Los maravillas observadas, vividas de cerca, en sus propias manos o de sus amigos son recordadas no ya con la mente consciente, sino con el inconsciente. Y cuando vuelven al lugar donde vieron magia, aunque sólo sea para tomar un refresco, su mente evoca los momentos divertidos que pasaron anteriormente.
Nos alegra que la magia siga tan de moda y llegue a cada rincón de Madrid.
